La apacibilidad y poca profundidad de sus aguas las hacen ideales para el turismo familiar; en ellas disfrutarán de lo hermoso niños y mayores. Son vafrias las sendas en San Carlos de la Rápita que harán las exquisiteces de los fanáticos de la naturaleza y el deporte. No nos olvidaremos, como es natural, de las playas de la Rápita, indiscutiblemente uno de sus mayores atractivos. No menos popular resulta el Puerto pesquero y deportivo de la Rápita, considerado de los primordiales de toda Cataluña. En verdad, una gran parte del pescado consumido en la Comunidad Autónoma es tomado en estas costas. Así, su proximidad a la montaña, al Mar Mediterráneo y al Parque Natural del delta del Ebro multiplica exponencialmente la pluralidad de actividades que llevar a cabo en San Carlos de la Rápita.
Tras ser reconquistado en el siglo XI, se estableció una comunidad de frailes hasta el siglo XVI. También destaca el mirador de la Guardiola, de 116 metros de altura, correcto para contemplar la panorámica del Delta. Allí es frecuente ver a los amantes del kitesurf volar sus cometas para cabalgar sobre las olas. Mucho más tranquilo es el paddle surf en la zona de la bahía, donde las aguas están muy calmadas y resulta simple examinar la costa a golpe de remo sobre la tabla. Si escogemos probar el género ya cocinado y en tierra, no nos faltarán buenas opciones entre varios de los mejores sitios de comidas de Sant Carles de la Ràpita.
Ruta De Las Mejilloneras
De este modo, platos como el “xapadillo”, a base de anguilas, la baldana de arroz , la butifarra de cordero, los mejillones, ostras, langostinos y cigalas son algunos de los sabrosos ejemplos que podremos comer en San Carlos de la Rápita. La fortuna de poder contar con ingredientes provenientes de estas tres fuentes (los espléndidos cultivos de la zona y las atrapas tanto en el mar Mediterráneo como en las aguas del Ebro) es bien aprovechada por los sitios de comidas en San Carlos de la Rápita. Y sucede que la experiencia de comer en Sant Carles de la Ràpita conjuga la combinación culinaria de los mejores modelos de la huerta, el mar y el río Ebro. En el ambiente del Parque Natural de Delta del Ebro, a unos diez minutos caminando de la playa, este hotel boutique tiene restaurante en el que se sirven mariscos de la zona. Cuenta con terraza con vistas al mar y 2 piscinas, sala de reuniones, parking gratis, región de juegos para pequeños y restaurante.
Entre las más conocidas es la Playa del Trabucador, a 10km del centro de Sant Carles en pleno Delta del Ebre. Sobre España Datos y curiosidades del país, su cultura, su naturaleza, su gastronomía o su población. Como asimismo muy vivos están los millones de ejemplares de mejillones y ostras que se cosechan en las bateas. Entre las atracciones turísticas más interesantes y distintas que se pueden hallar en Sant Carles de la Ràpita es recorrer la ruta de las mejilloneras en un tipo de embarcación llamado golondrina. Entre las tres y las 4 y media de la tarde, esos navíos comienzan a llegar al puerto, cargados con las atrapas del día. Solamente atracar, el pescado es trasladado, todavía coleando, a la lonja de Sant Carles de la Ràpita.
Parque Natural Del Delta Del Ebro
Desde la siembra, la recogida o la explotación de los moluscos, Agustí no dejará sin contestar ninguna de vuestras inquietudes. Ubicado en la cima del monte de La Torreta, entre los puntos más superiores de la población disfrutaremos de una de las mejores panorámicas del litoral catalán. La Oficina de Turismo de Sant Carles de la Rápita está ubicada en el Parc de Garbí, en pleno paseo marítimo. Caminos y sendas para realizar tanto caminando como en bicicleta son uno de los enormes atractivos de este paraje. No olvidar que no tenemos la posibilidad de irnos sin pararnos a observar los singulares flamencos que están en la Encanyissada o la Bassa de les Olles, 2 de las primordiales lagunas del parque.
La Rápita obsequia al visitante con un biodiversidad de extensos parajes con profusa vegetación y diversas especies animales. En esta región, los flamencos sobrevuelan humedales y cultivos, arrozales y salinas, señales de identidad del territorio. Para probar los arroces de la región –un delito no hacerlo en esta cuna del arroz–, debemos sentarnos a la mesa del restaurante Llansola 1921, negocio familiar que transporta mucho más de un siglo deleitando paladares con sus arroces y pescados de primera calidad. Al estar situada esta ciudad cerca de la Sierra del Montsiá, da un sinfín de posibilidades para los fanáticos de las ocupaciones al aire libre y del turismo activo. Los viajeros podrán disfrutar de un sinfín de ocupaciones, como paseos y excursiones en barco por el Delta del Ebro, alquiler de barcas, bicicletas, kayaks, rutas de senderismo, etc.
Esto sirve tanto para el nuestro para la mayor parte de weblogs de viajes que podéis hallar. La oferta de alojamientos en Sant Carles de la Ràpita dista bastante en amplitud de otras localidades vecinas. Restaurant Miami Perro PonsAunque nosotros no somos precisamente críticos culinarios, estamos ante un lugar de comidas lleno jueves del mes de marzo y con clientela muy recurrente con lo que pudimos ver y percibir. El día que comimos en Sant Carles de la Ràpita lo hicimos en el Lugar de comidas Miami Can Pons, uno de los que forma parte del colectivo.
La Badia dels Alfacs está cuidada de manera natural por la Punta de la Banya, una reserva natural parcial de donde se pueden avistar un elevado número de aves y donde se ubican las Salines de la Trinitat. En esta zona se extiende la playa virgen del Trabucador, un espacio ideal para la práctica de todo tipo de deportes náuticos, como la candela, el submarinismo, el windsurf, motocicletas acuáticas, el wakeboard y la pesca. Nubes amenazantes sobre el puerto de Sant CarlesSan Carles de la Rápita huele a mar, a Delta del Ebro, a parque natural, a salinas… Su localización estratégica entre la sierra del Monstiá y el mar, lo hacen único. Achicar a turismo de sol y playa tremendo fenómeno natural sería un sacrilegio, conque os vamos a ofrecer múltiples cosas que hacer en Sant Carles de la Rápita a fin de que saquéis el máximo beneficio a este idílico rincón de la provincia de Tarragona,en Cataluña.
Por otra parte, la gastronomía del municipio recoge las tradiciones de la vocación marinera y aprovecha los frutos del mar y los de la tierra. Y se tiene que poner émfasi que en las mesas rapitenses hay vino con denominación de origen Terra Alta y el aceite de oliva con denominación de origen Baix Ebre y Montsià. Guardar mi nombre, mail y portal web en este navegador la próxima vez que comente.
El alquiler de apartamentos en San Carlos de la Rápita va a ser una fantástica opción para esos que eligen mayor independencia, autonomía y elasticidad de horarios. El Lugar de comidas Cal Manu está en Carrer Sant Josep, y da menús tanto de semana como de fin de semana. De precio medio, da recetas y artículos tradicionales de la zona pero preparadas de forma moderna e renovadora. Su apuesta radica en la combinación de los productos frescos y tradicionales de la zona con la preparación y cierto “toque” diferente e revolucionario. La singular ubicación de nuestra personaje principal de hoy se refleja de forma muy palpable en su gastronomía.
Las notas musicales, por su parte, son interpretadas en el Festival En todo el mundo de Guitarra durante los meses de verano. Sus habitaciones ofrecen aire acondicionado, televisión satélite, conexión wi-fi gratis, balcón y baños privados y vistas al mar. Sus 16 habitaciones proponen conexión wifi gratis, aire acondicionado, minibar, reproductor de cd y dvd, televisión de plasma, caja fuerte y lindas vistas a la bahía. La salida del sol o la hora mágica, como la conocen los fotógrafos, es especialmente mágica en La Rápita. Desde el azul intenso de la noche a los dorados de las primeros minutos de sol, lograras disfrutar observando de qué forma se pierde y entremezcla en el horizonte el agua de la Bahía de los Alfaques con la península que el delta del Ebro le hurta al mar.
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De entre la gastronomía, sobre todas las cosas es obligado mencionar el langostino, delicioso y de enorme fama. Las condiciones climáticas de la región y las ricas aguas dulces del Ebro parecen tener la culpa de ello. En la costa tarraconense, Sant Carles de la Ràpita se muestra como un destino total lleno de sorpresas. Con unas increíbles vistas al Ebro, Un imponente castillo de origen musulmán, una llamativa iglesia y un hermoso entorno natural. Desde las excursiones a las mejilloneras de San Carlos de la Rápita, donde, aparte de catar delicias del mar, se nos explicará esta fuente de riqueza biológica y económica, a las jornadas de pesca tradicional, pasando por la sorprendente visita a la lonja. Merece la pena, y mucho, vivir la experiencia de un día en las vidas de los pescadores y los clientes que allí se acercan para comprar los más destacados ejemplares.